Carrera con dos partes muy diferenciadas. Una primera es el recorrido desde Villaluenga del Rosario a Grazalema, recorrido muy técnico y exigente unido con la dificultad de ser por la noche. Tras llegar a Grazalema el recorrido transcurre por senderos y pistas que llegan a hacerse algo monótonos. Se puede realizar andando a ritmo rápido y llegar antes del corte de las 9h. Es para repetir pero si buscas una Trail que transcurra en un 100% por sierra, esta no es tu carrera debido a que casi 15 km son de senderos que se te pueden hacer eternos. (fotos del I Trail Virgen de las Piedras del FB de la organización)
El Recorrido
Es necesario felicitar y dar las gracias a los voluntarios, hubo avituallamientos que estaban con un viento insoportable y allí estaban animando, aguantando e incluso nos habían quitado la piel al melón...de diez y muchas gracias de corazón. Como me parece poco agradecimiento seguimos...gracias a todos los voluntarios que estaban en la sierra, aún recuerdos a dos chicos con un cartel que estaban muertos de frío, gracias a todos los voluntarios de los avituallamientos que estabais en la soledad de la noche, a horas intespectivas y algunos en medio de una corriente de aire, gracias a todas las personas que estaban en Grazalema avisando del recorrido...
La organización ha sido buena, los avituallamientos eran abundantes con fruta; plátano, melón y en algunos sandía (que rico estaba el melón), isotónica, agua para rellenar los bidones y en algunos frutos secos, chocolate y golosinas. La bolsa del corredor también estaba muy bien.
Detalles a mejorar de la organización serían la página web que no se actualizaba y la señalización del kilometraje.
En cuanto a la página web creemos que es muy mejorable (no así la página de facebook) y en cuanto al kilometraje, o hubo una gran mayoría que se confundió de camino o el recorrido estaba mal medido, en todos los avituallamientos había discrepancias entre lo que te decían los voluntarios y lo que te decían los corredores con GPS. Entiendo que la parte de sierra sea más difícil señalizar los kilómetros, pero en la parte de carriles y en los avituallamientos se hubiese agradecido algún cartel informando del kilómetro por el que íbamos. Puede parecer tema baladí pero para un corredor desorientado, sin GPS y de noche, encontrarse un cartel de la organización señalando de forma exacta en que kilómetro estamos es algo muy útil, sobre todo para hacer una estimación de cuanto queda. Realmente pensamos que la carrera estaba mal medida ya que de los 31 km aproximados que decía la organización a nosotros nos salen 33,5 km aproximados, y cuando quien lleva GPS te dice que ya has superado el km 31 y tú estás en medio de una cuesta interminable y el pueblo ni se ve...
Detalles a mejorar de la organización serían la página web que no se actualizaba y la señalización del kilometraje.
En cuanto a la página web creemos que es muy mejorable (no así la página de facebook) y en cuanto al kilometraje, o hubo una gran mayoría que se confundió de camino o el recorrido estaba mal medido, en todos los avituallamientos había discrepancias entre lo que te decían los voluntarios y lo que te decían los corredores con GPS. Entiendo que la parte de sierra sea más difícil señalizar los kilómetros, pero en la parte de carriles y en los avituallamientos se hubiese agradecido algún cartel informando del kilómetro por el que íbamos. Puede parecer tema baladí pero para un corredor desorientado, sin GPS y de noche, encontrarse un cartel de la organización señalando de forma exacta en que kilómetro estamos es algo muy útil, sobre todo para hacer una estimación de cuanto queda. Realmente pensamos que la carrera estaba mal medida ya que de los 31 km aproximados que decía la organización a nosotros nos salen 33,5 km aproximados, y cuando quien lleva GPS te dice que ya has superado el km 31 y tú estás en medio de una cuesta interminable y el pueblo ni se ve...
Nuestra Carrera
Esta carrera nos la habíamos preparado a conciencia ya que nos iba a valer como referencia para nuestra siguiente trail. Íbamos cuatro representantes del Aborigen Trailrun Team de Chiclana de la Frontera, Gustavo, Jose, Juan y Pedro. Nuestra idea era apretar algo hasta el kilómetro 10 para ver cuanto tardábamos, ya que esa era la referencia que buscábamos, y después del km 10 la idea era disfrutar.
La salida era en la plaza de toros.Salimos en última posición y tras cruzar la puerta grande nos enfrentamos a una subida suave y larga que nos llevaría a la sierra, ver la serpiente de luces rojas y la luna en el firmamento ya pronosticaban que esta sería una carrera para recordar. En seguida llegamos a la primera subida de sierra, era imposible correr, tanto por el desnivel como por el tapón de corredores. Cuando por fin se abría un hueco adelantábamos lo que se podía, ya que cuando no era por el desnivel era por lo abrupto del terreno, terreno muy técnico y peligroso.
Así, andando y trotando lo que podíamos, tres de nosotros llegamos al kilómetro 10 en poco más de 2h. En este kilómetro nos dividimos, uno esperaría al rezagado y dos seguiríamos hacia el segundo avituallamiento. Este tramo para mí fue uno de los más divertidos, ya se habían abierto huecos y mi compañero y yo avanzábamos por la sierra al ritmo que habíamos entrenado durante meses, disfrutando del paisaje (si de noche) y muy muy atentos al camino que seguía siendo muy técnico.
Tras una bajada muy técnica, muy entretenida y con muy buenas sensaciones llegamos al segundo avituallamiento, según el GPS era aproximadamente el km 18, aquí esperamos a nuestros compañeros mientras hacíamos acopio de fruta y frutos secos.
En este segundo avituallamiento se había acabado la diversión, terminaba el tramo de sierra. Ahora tocaba bajar por senderos cómodos hasta llegar a Grazalema. En Grazalema fue una sorpresa encontrarnos a tantos vecinos animando y aplaudiendo, gracias. Al salir del pueblo estuvimos a punto de perdernos ya que hubo un punto confuso donde faltaba o una baliza o un voluntario. Seguíamos por senderos cómodos y de bajada hasta llegar a la que hemos bautizado como la cuesta "diabólica", no era técnica, ni creo que tuviese más de 100 metros de desnivel, pero allí vimos a muchos romperse.
Tras subir esta cuesta nos encontramos el tercer avituallamiento, en el km22 según GPS. Nosotros habíamos subido bien la anterior cuesta y estábamos bien (yo personalmente me sentía muy entero) tomamos sandía y tanto a mi como a Pedro nos sentó mal.
Tras pasar toda la sierra con buenas sensaciones, sería a partir de aquí cuando la cosa empezó a torcerse. Todo era carril monótono con un viento desapacible. Empezamos a trotar en llanos y cuestas abajo y andar en cuestas arriba. Antes de llegar al tercer avituallamiento en el km 28, el grupo se rompió. Gustavo iría a su ritmo constante, Juan y Pedro seguirían con la técnica de trotar-andar y yo a duras penas intentaría aguantar con ellos dos. Ya se había terminado ese "subidón" de ir por la sierra, esto era carril y más carril, oscuridad, viento...
Faltando unos doscientos metros para el cuarto avitullamiento, km 28, veía como me esperaban mis dos compañeros y como el viento azotaba el tenderete y a los voluntarios. Pensé que algún día deberíamos ser voluntarios para poder agradecer la labor que hacen. Nos avisaron que ahora venía una cuesta bastante larga...vaya si era larga.
Seguíamos por senderos, algunos más complicados debido a los surcos de ruedas muy profundos, hasta llegar a la última subida. Era una subida de carril, con poco desnivel pero muy larga (me trajo recuerdos de la 101). Pasamos el km 31 y el 32 y el pueblo no aparecía. Sí apareció un cartel para senderistas que nos informaba que aún quedaban 1,5 km para llegar a Villaluenga. Por fin, tras terminarse la cuesta vimos al fondo el resplandor de las luces del pueblo y de los focos de la plaza de toros.Tocaba bajar por una cuesta de asfalto en la que parecía que se me iban a romper las rodillas antes de llegar al pueblo.
Estábamos ya en las calles de Villaluenga, nos cruzábamos corredores con su medalla de finisher al cuello que nos aplaudian y nos daban ánimos. Ya en la puerta grande de la plaza de toros nos dimos las manos para entrar juntos. Lo habíamos conseguido, meses de madrugones y de kilómetros tomaban sentido, esos entrenos por el monte en plena noche en los que yo me preguntaba "¿Qué hago yo aquí?" habían merecido la pena...habíamos acabado el I Trail Nocturno Virgen de las Piedras.
Son momentos como estos los que te hacen seguir, saber que has cumplido con tus objetivos y has ganado la batalla contra tí mismo. Ahora, a por el siguiente reto...
Prueba muy dura, la primera parte por su recorrido técnico y la segunda por ese carril de vuelta interminable.
Esta carrera nos la habíamos preparado a conciencia ya que nos iba a valer como referencia para nuestra siguiente trail. Íbamos cuatro representantes del Aborigen Trailrun Team de Chiclana de la Frontera, Gustavo, Jose, Juan y Pedro. Nuestra idea era apretar algo hasta el kilómetro 10 para ver cuanto tardábamos, ya que esa era la referencia que buscábamos, y después del km 10 la idea era disfrutar.
La salida era en la plaza de toros.Salimos en última posición y tras cruzar la puerta grande nos enfrentamos a una subida suave y larga que nos llevaría a la sierra, ver la serpiente de luces rojas y la luna en el firmamento ya pronosticaban que esta sería una carrera para recordar. En seguida llegamos a la primera subida de sierra, era imposible correr, tanto por el desnivel como por el tapón de corredores. Cuando por fin se abría un hueco adelantábamos lo que se podía, ya que cuando no era por el desnivel era por lo abrupto del terreno, terreno muy técnico y peligroso.
Esperando la salida |
De la plaza de toros a la sierra |
Era imposible adelantar |
Km 18 se había terminado la sierra |
En este segundo avituallamiento se había acabado la diversión, terminaba el tramo de sierra. Ahora tocaba bajar por senderos cómodos hasta llegar a Grazalema. En Grazalema fue una sorpresa encontrarnos a tantos vecinos animando y aplaudiendo, gracias. Al salir del pueblo estuvimos a punto de perdernos ya que hubo un punto confuso donde faltaba o una baliza o un voluntario. Seguíamos por senderos cómodos y de bajada hasta llegar a la que hemos bautizado como la cuesta "diabólica", no era técnica, ni creo que tuviese más de 100 metros de desnivel, pero allí vimos a muchos romperse.
Tras subir esta cuesta nos encontramos el tercer avituallamiento, en el km22 según GPS. Nosotros habíamos subido bien la anterior cuesta y estábamos bien (yo personalmente me sentía muy entero) tomamos sandía y tanto a mi como a Pedro nos sentó mal.
Tras pasar toda la sierra con buenas sensaciones, sería a partir de aquí cuando la cosa empezó a torcerse. Todo era carril monótono con un viento desapacible. Empezamos a trotar en llanos y cuestas abajo y andar en cuestas arriba. Antes de llegar al tercer avituallamiento en el km 28, el grupo se rompió. Gustavo iría a su ritmo constante, Juan y Pedro seguirían con la técnica de trotar-andar y yo a duras penas intentaría aguantar con ellos dos. Ya se había terminado ese "subidón" de ir por la sierra, esto era carril y más carril, oscuridad, viento...
Faltando unos doscientos metros para el cuarto avitullamiento, km 28, veía como me esperaban mis dos compañeros y como el viento azotaba el tenderete y a los voluntarios. Pensé que algún día deberíamos ser voluntarios para poder agradecer la labor que hacen. Nos avisaron que ahora venía una cuesta bastante larga...vaya si era larga.
Seguíamos por senderos, algunos más complicados debido a los surcos de ruedas muy profundos, hasta llegar a la última subida. Era una subida de carril, con poco desnivel pero muy larga (me trajo recuerdos de la 101). Pasamos el km 31 y el 32 y el pueblo no aparecía. Sí apareció un cartel para senderistas que nos informaba que aún quedaban 1,5 km para llegar a Villaluenga. Por fin, tras terminarse la cuesta vimos al fondo el resplandor de las luces del pueblo y de los focos de la plaza de toros.Tocaba bajar por una cuesta de asfalto en la que parecía que se me iban a romper las rodillas antes de llegar al pueblo.
Estábamos ya en las calles de Villaluenga, nos cruzábamos corredores con su medalla de finisher al cuello que nos aplaudian y nos daban ánimos. Ya en la puerta grande de la plaza de toros nos dimos las manos para entrar juntos. Lo habíamos conseguido, meses de madrugones y de kilómetros tomaban sentido, esos entrenos por el monte en plena noche en los que yo me preguntaba "¿Qué hago yo aquí?" habían merecido la pena...habíamos acabado el I Trail Nocturno Virgen de las Piedras.
Son momentos como estos los que te hacen seguir, saber que has cumplido con tus objetivos y has ganado la batalla contra tí mismo. Ahora, a por el siguiente reto...
Hubo magía en Villaluenga |
Prueba muy dura, la primera parte por su recorrido técnico y la segunda por ese carril de vuelta interminable.
Enhorabuena por la carrera. Creo que el punto confuso era a la entrada de Grazalema
ResponderEliminarGracias por comentar Miguel. La verdad es que a la entrada de Grazalema íbamos tras otro grupo que nos guiaba, así que no nos dimos cuenta de otro punto confuso.
ResponderEliminarSi queremos dejar claro, que la carrera estaba muy bien señalizada, aunque en algún momento uno se quedara pensando "y ahora para donde tiro", pero era eso: pararse, levantar la vista y mirar con antención.
Un saludo
Yo la corro hoy y tngo dudas,no sobre la carrera.. Alguien sabría decirme si hay duchas o vestuarios para cambiarse??.. Voy d lejos y n se si podre vestirme allí o ya me voy vestido.. O si podre ducharme después .. Gracias
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