viernes, 23 de diciembre de 2016

Crónica IV Trail Las Palomas, Zahara de la Sierra 2016

Si estás buscando información para saber si merece la pena inscribirse en este trail el resumen es SI. Para la información de la carrera hacemos copia y pega de la crónica del 2015 salvo el recorrido que este año ha sido algo más largo.

La carrera

Es una carrera dura y muy exigente, tiene bastantes subidas por senderos en los que solo puede pasar una persona (tapones) y bajadas parecidas. Tiene todo lo que le puedes pedir a una trail: distancia asequible (ojo que este año ha sido al límite eso de distancia asequible) , escenario inmejorable y dureza. Es una trail para repetir, merece la pena el dinero de la inscripción, además la bolsa del corredor llevaba camiseta de manga larga y una braga (en 2016 no ha habido braga),  pero no la recomendaríamos como primer contacto al trail por su exigente desnivel acumulado.

El recorrido
Recorrido circular de casi 25 km y 1600 metros de desnivel acumulado positivo de una belleza impresionante.

Organización
Buena organización este año no hay peros.

Muy bien:
- El balizaje; ha sido muy bueno, de los mejores que hemos visto. Realmente si hubo un punto conflictivo tras el último avituallamiento, aunque  la baliza estaba si faltó un voluntario en el cruce donde varios corredores se desviaron.
- Avituallamientos;todo muy abundante, era perfecto. Al llegar a meta había un guiso buenísimo al que solo le faltaba una cerveza (en 2016 nos daban una lata en la bolsa del corredor).

A mejorar:
- La página web; es necesario que las organizaciones de las carreras se den cuenta de que un corredor popular busca en la página de la organización una interacción rápida y en esta página hay muchos mensajes de corredores sin responder. Otras dos cosas que busca todo popular es que las clasificaciones y las fotos no haya que buscarlas por internet, si no que estén en la web de la carrera y cuanto antes mejor. Esto ya lo vemos en varias Trails, se centran en la página de Facebook y descuidan la página web oficial.

Nuestra carrera
Al igual que el año pasado íbamos cuatro representantes del Aborigen Trailrun Team; Gustavo, Pedro, Jose María y Juan. Salvo Juan que venía fuerte de Jarapalos, el resto teníamos como objetivo entrar dentro del corte.

La mayoría del grupo de trail Aborigen cuando nos planteamos una carrera trail, lo primero que hacemos es mirar el tiempo de corte de la carrera, en este caso eran 4h 20 min que se nos atojaban un tiempo exigente pero factible. La crónica la contaré yo Jose María.

Tras lograr aparcar en Zahara fuímos ya vestidos de "romanos" a por los dorsales, y por primera vez en mi vida, y espero que última, me he colado en la recogida de un dorsal. Llegamos a la plaza, vimos la mesa de los dorsales vacía y al acercarme el hombre me preguntó el número de dorsal, tras decírselo, mi compañero me advirtió que nos acabábamos de colar, entonces miré para atrás y ví la cola y pensé "tierra trágame" así que antes de seguir con la crónica, pedir disculpas.

Tras el bochorno del dorsal, me puse a esperar la salida al final del todo, ya que aunque realmente no tengo ningún problema en salir en esa posición, en esta ocasión lo ví más justificado. Se dió la salida y me puse al ritmo de los últimos ya que no tenía intención de adelantar a nadie. La salida del pueblo es en bajada por un kilómetro, luego un repecho en el que seguía de los últimos y una bajada por carril ancho donde empecé a apretar.


Creo que sería el kilómetro 2 donde ya empezaban las cuestas "de verdad" era una subida de unos tres kilómetros donde los pocos a los que había adelantado en la bajada me iban cogiendo, tras llegar a la primera cima, por el kilómetro 5, empecé de nuevo en la bajada a apretar gracias a que los corredores cuando me escuchaban me dejaban paso, por fin empecé a ver un grupo grande y a uno de mis compañeros, me pegué a él y llegamos al primer avituallamiento, cruzamos una carretera y llegamos a un tapón ya que era la parte que teníamos que andar unos metros sobre una tubería.

 

Tras pasar nosotros por la tubería, ya no podíamos hacer otra cosa que adaptarnos al ritmo del grupo ya que pasábamos por una zona que no estaba para ir adelantando.




Tocaba ir al ritmo del grupo, que tampoco era mal ritmo, aunque me preocupaba que cada vez que veía un cartel con el kilometraje y veía el tiempo en carrera calculaba que íbamos unos 10 minutos por encima del tiempo de corte previsto. Por el kilómetro 13 llegamos a la parte más alta del recorrido, donde tocaba hacer foto ya que los paisajes durante esta subida, realmente durante todo el recorrido, eran preciosos.




La bajada hasta el segundo avituallamiento fue disfrutar como enanos, íbamos Pedro y yo al ritmo de bajada impuesto por una corredora, el ir a la sombra de esta corredora nos hizo la bajada mucho más sencilla y divertida. Ya tras el segundo avituallamiento, viendo que seguíamos fuera del tiempo de corte  y sabiendo que aún nos tocaba  la subida dura, que yo conocía y la había bautizado como "la cuesta de zahorra", más la subida que habían añadido este año, opté por hacer lo que faltaba de bajada y de llaneo hasta llegar a la subida de zahorra solo, a un ritmo algo más rápido, ya que tenía que compensar en bajada el ritmo que sabía que luego llevaría en subida.


Así fue, a mitad de la cuesta de zahorra ya me iban adelantando el grupo con el que había bajado la primera parte y que dejé en el avituallamiento. Las subidas se me dan fatal, veo a la gente andar y yo tengo que ponerme a trotar en la subida para ponerme a ese ritmo de "andar", así que según avanzaba la cuesta el grupo se iba alejando.





Por fin llegamos al final de cuesta de zahorra y cerca del punto donde el año pasado ya era bajar por la carretera, pero este año nos desviaban a la izquierda por un nuevo recorrido que tras una dura subida unía con la primera parte del recorrido, yo diría que el tercer avituallamiento era el primero pero ni lo aseguro porque llegué frito. El tramo desde que nos desviaron en la cuesta de zahorra hasta el avituallamiento, se me hizo eterno y sufrí un dolor en la espalda baja  de esos que te hacen jurar y perjurar que nunca más harás un trail.

Tras llegar el avituallamiento y calcular que quedaban unos 6 kilómetros para meta y que seguía 10 minutos retrasado sobre el corte, me quedé un poco bloqueado ya que a pesar de saber que en algún momento llegaría una bajada, por ahora lo que veía seguía siendo subida. No fue hasta el kilómetro 22 donde ví la oportunidad de correr y tratar de, al menos, alcanzar a mi compañero Pedro que también se me había ido en la subida. Iba trotando a lo que podía sin mirar ya el reloj, con la esperanza de llegar en tiempo, así alcancé primero a Gus, al que no veía desde la salida,  y luego a Pedro que me comentó que ya era imposible entrar en tiempo, que lo mejor era esperar a Gus y entrar los tres a la vez.  Al final 4h 32min, aunque la organización con buen criterio abrió el tiempo de corte.

Mientras estaba sentado en la plaza al resguardo del viento comiéndome el menudo y tomando la lata de cerveza, les decía a mis compañeros que este era mi último trail que lo había pasado fatal en la subida "nueva", ya luego en el coche la conversación era sobre trails...


lunes, 14 de noviembre de 2016

Crónica II Desafío Trail Sierra de Villaluenga


La Carrera

Si te gusta un Trail con una primera parte rápida con zonas técnicas y estupendos paisajes seguidos de una parte final dura donde  tendrás que ayudarte de las manos para poder subir debido a la gran pendiente y con tramos en los que dudarás del estado mental de la persona o personas que han diseñado el recorrido, este es tu trail. Si por el contrario no te gustan los trails muy, pero muy, técnicos o simplemente sufres de vértigo, ni se te ocurra hacer este trail. Es duro, tranquilamente se podrían sacar dos modalidades de él, una modalidad  sería el primer anillo de unos 15 kilómetros  donde se sube al puerto del correo y pasamos por buenas subidas, zonas corribles y preciosas, zonas en bajada muy técnicas, senderos, subidas de asfalto duras…y por fin llegada al pueblo y sería un bonito trail “modalidad corta”, lo que espera a los corredores tras el paso por Villaluenga es una subida dura y técnica, a partir del kilómetro 18 te girarás para hacer dos cosas: hacer varias fotos de la vista, ví águilas volando por debajo de mía, y hacerte preguntas del tipo ¿Qué estoy haciendo aquí?¿De verdad este es el recorrido?

De verdad, si te gustan los trails cortos, técnicos y con paisajes que quitan el hipo, apúntate.

El recorrido





Organización

Buena organización, con buen número de avituallamientos y uno de ellos con frutos secos que hacía tiempo que no veía. Como va siendo habitual el personal voluntario de 10.  Aunque ahora comente algunas cosas a mejorar, es por decir algo ya que todo fue estupendo.

A mejorar
     - Balizas; había banderolas verdes, rojas y naranjas, por favor, para la próxima mejor las rojas o naranjas ya que las verdes había algunas que se confundían con el paisaje, sobre todo en la subida “dura”. Hubo algún punto donde faltó alguna baliza y que había confusión, he llegado a la conclusión de que los que balizan al ser de la zona dan por sentado que en algunos senderos es evidente por donde seguir y eso para el que nunca ha estado allí no es así, en cada cruce debe de haber una baliza ya que para el que no conoce la zona lo mismo puede valer coger por el camino  “evidente” que por el otro y eso se soluciona con una simple baliza en cada posible intersección. La organización no debe de dar por sentado que todo el mundo conoce la zona porque no es así.
      
       - Agua: sé que es muy difícil poner agua arriba,  pero se echó de menos agua en el punto geodésico. Yo corro con bidones y llegar al avituallamiento se me hizo eterno, de hecho le pedí agua a unos senderistas. Quizás el voluntario que estaba en el punto geodésico debería tener una botella de 5 litros como emergencia, no mostrarla ni ofrecerla pero sí tenerla.
       
       - Página web: la página web tanto de este trail como de  Naturaventura Trail Series deja mucho que desear, hoy en día un trail sin una buena web que tenga un contacto fluido y rápido con los corredores pierde mucho. Se deberían de plantear si quizás parte de la poca afluencia de corredores está también provocada por la mala gestión de la página, ya que, aunque tengan una página de Facebook, los que buscan información sobre esta carrera o sobre la liga a la que pertenece llegan a la página web y no a la de Facebook. 

       - Bolsa del corredor: por favor para otro año, poned algo de los embutidos que pusisteis en el avituallamiento de meta en la bolsa del corredor. Esa butifarra o esa morcilla para la bolsa.
 

Nuestra carrera

Del grupo Aborigen Trailrun Team cuatro haremos el Ultra Trail Sierras del Bandolero, tres en la modalidad corta y uno en la larga. Dos de nosotros decidimos hacer este II Trail Desafío Sierra de Villaluenga como parte del entrenamiento para Bandolero.

Al final, por enfermedad, solo uno participó, José María, así que me toca hacer la crónica…

Debido a la cantidad de veces que este año cada vez que he salido a hacer un trail era camino a Ronda, me confundí con el coche e hice un recorrido enorme para llegar a Villaluenga del Rosario, a las 8:40h llegué al pueblo y tras aparcar en el parking me dirigí a recoger el dorsal al lado de la plaza de toros. La entrega fue muy rápida ya que apenas había corredores y me encontré una sorpresa positiva y es que daban la bolsa del corredor al finalizar, a mí eso personalmente me gusta ya que en más de una ocasión me he visto en la obligación de meter la bolsa dentro de la mochila para no tener que volver al coche.
Recogiendo dorsal

Debido a que quedaba tiempo de sobra fui a la cafetería cercana al parking donde me cobraron 1,20€ por un café solo, el café estaba bueno que conste. Evidentemente  para el año que  viene llevaré un termo de café.

Ya en la plaza de toros ví que éramos muy pocos corredores, sobre unos cien, y es que al día siguiente se disputaba una carrera en El Bosque. 
A pesar de mi dedo se aprecia el número de corredores
Grupo de Jerezanos que conocía de un entreno en Sierra San Cristóbal

Se dio la salida y salimos dirección al puerto del correo, creo que era el nombre, al poco de atravesar la carretera venía la primera cuesta mitad asfalto y mitad carril que terminaba en una intersección donde estaban montando un avituallamiento, tirábamos hacia la derecha y comenzaba una bajada donde se iniciaba el verdadero trail, parajes preciosos con zonas con piedra suelta y algo de barro  y así hasta creo que el kilómetro 5 donde comenzaba la subida al puerto del correo. Quiero dejar claro que no me conozco la zona y creo que esto era la subida del puerto al correo, si alguien conoce el nombre exacto que me lo diga y lo corrijo, ya que también me comentaron que era la Sierra de Libar.
Esta foto y las que están a continuación son de la zona de subida al puerto el Correo
En esta crónica repetiré muchas veces la expresión “paisajes preciosos” pero es que lo que te encuentras en este trail, de hecho nos cruzamos con no menos de cien senderistas de todo tipo disfrutando del fin de semana. La subida y bajada  al puerto del correo sería aproximadamente del km 5 al 10 y consistía en una subida dura con paisajes espectaculares, un llaneo con zonas trotables con vacas como espectadoras y una bajada entre alcornocales técnica. Fue en esta bajada donde me doblé un tobillo y durante un minuto dudé  de si ahí había acabado mi aventura, por suerte el dolor fue remitiendo. Luego me encontré con más corredores que también se habían caído en esa bajada. 

A tres metros de hacer esta foto fue donde me torcí el tobillo
 Tras esta bajada técnica volvíamos a un llaneo por un prado donde encontré el avituallamiento de los frutos secos y pensé que ya sería llano hasta el pueblo, error mío.  Se llegaba a una cuestaza de cemento de unos 3 kms que acababa en la intersección donde ahora si estaba el avituallamiento que estaban montando antes, les comenté a los voluntarios, era una pareja y ella llevaba la chaqueta de finisher del Valle del Genal, que tenían un recorrido con algunas zonas muy técnicas y se miraron entre ellos como extrañados, entonces el hombre me dijo que esperara a llegar a la cuesta de después del pueblo que ahí estaba lo técnico y ahí si vería piedras, tras darles las gracias seguí  trotando ahora venía la primera cuesta del recorrido ahora en bajada pero no podía correr mucho ya que desde la caída notaba molestias en la rodilla izquierda, lleva así un año,  y algo más preocupante aún y es que notaba como el comienzo de una ampolla en el pie derecho, eso en teoría era imposible ya que apenas llevaba 14 kilómetros de carrera. Bajé esta cuesta bastante dolorido, atravesé la carretera y el pueblo en dirección a una ermita, allí me esperaba un  avituallamiento solo de agua donde cometí el error de solo rellenar los botellines pero no hidratarme bien, tampoco sabía lo que me esperaba.


Con toda seguridad era el corredor que cerraba la prueba, como siempre,  y para mi alegría por fin empecé a ver a lo lejos a algunos corredores…mi sorpresa era que venían para atrás: “me he dado un golpe con una roca”, “me he doblado el tobillo”…así cuatro corredores, yo acaba de alcanzar a una corredora que me decía “yo no me acordaba de esta cuesta si no no me apunto”, ¿Qué cuesta era esa? Alcancé a un corredor con el que había compartido gran parte del recorrido por el puerto El Correo pero que perdí en la bajada técnica, al verme me dijo que se encontraba un poco mal y que no se veía con ganas de seguir. Él se sentó a coger fuerzas y yo aproveché para sentarme y echar un vistazo al pie derecho, lo que ví era peor de lo que me imaginaba, tenía una ampolla enorme y ya reventada en la planta del pie y otra formándose en el dedo gordo.
Aquí estaba sentado mirándome el pie
La subida tenía la dificultad añadida de tener puntos con piedras sueltas



Me puse el calcetín y me apreté bien el zapato. Le ofrecí un dátil al otro corredor que seguía convencido de abandonar. Lo toqué y tenía el sudor frío  por lo que no me pareció mala idea abandonar ahora que aún estaba cerca del pueblo. Realmente aún no había tenido una perspectiva real de a que me enfrentaba, ya por fin miré hacia arriba e intenté hacerme una idea, localicé unos puntitos a lo lejos y muy arriba que intuí serían corredores…

Un poco más arriba de la mitad estaban los corredores por lo que allí habría que ir
Esta vista era con la única compañía del silencio, el sol dándote en la cara, y unas águilas volando a tu altura
 La subida importante son unos 3 kilómetros donde hay zonas con piedras sueltas donde literalmente resbalas y zonas donde tienes casi que gatear, pero se va subiendo y cada vez que te giras te quedas embelesado con las vistas. La ampolla no me dolía si pisaba de plano pero sí cuando pisaba de lado y por esta subida el pisar con el pie doblado, o que se te doblara al pisar era una constante, cada vez que la pisada se doblaba era como si me clavaran agujas a través de la ampolla. Tardé 38 minutos en hacer un kilómetro, lo repito, 38 minutos para un kilómetro. Por cierto, la corredora que dejé atrás consiguió convencer al otro corredor para que no abandonara e iban subiendo por detrás de mía.

Tras una hora y media aproximada de subida llegué al punto más alto del recorrido, que coincidía con un punto geodésico y en el que había un voluntario esperando para hacernos una foto.
Por fin se terminaba la zona técnica de la subida aún quedaba pero ya era otra cosa
Ya solo quedaba la parte fácil de la subida arriba estaba el punto geodésico

Este tipo de terreno complicó mucho la subida
Tras este punto geodésico había una fuerte bajada, si la bajada era corrible o no, soy incapaz de decirlo ya que suficiente  tenía con el dolor de rodilla, el dolor de la ampolla y la sed que empezaba a notar. Llegamos a un prado corrible en el que troté lo que pude hasta que me crucé con unos senderistas a los que pedí agua, dar las gracias a estos dos senderistas porque yo iba bastante mal, rellené medio bidón y me querían dar más pero me daba apuro, luego me arrepentí porque me bebí el medio bidón de un trago. Al terminar el prado había una pequeña subida y por fin encontré el siguiente avituallamiento, donde además de rellenar bidones me hidraté todo lo que pude. Me dijo el voluntario que estaba allí que faltaban unos 2 kilómetros. Debido a que  comenzaba una bajada que aunque seguía siendo técnica era algo corrible intenté trotar pero cada traspiés o cada mal apoyo era un dolor en la ampolla. En esta última bajada, que creo que es por donde se sube en el trail nocturno que nosotros hicimos en 2015,  me dio tiempo a pensar en muchas cosas, entre ellas en ceder el dorsal de Bandolero, estaba en terreno bandolero y lo estaba pasando mal, ¿Y si en bandolero tenía una ampolla como la de ahora?¿De verdad iba a enfrentar a mi cuerpo a esa burrada?  En esas estaba buscando distraerme para intentar bloquear el dolor cuando llegué al final de la bajada, a una pista de zahorra que conocía del trail nocturno, sabía que ya estaba hecho me puse en modo ultrero  en busca de la plaza de toros, llegada en 5h 30min. Hacer 5h30min no estaba ni en mis peores planteamientos, de hecho mi mujer me llamó para preguntarme por donde iba ya que  le dije que tardaría unas 4h. Me tomé una cerveza con tapitas y para casa, las tapitas eran de embutidos que estaban de 10 y en abundancia. No puedo opinar de las duchas ya que no hice uso de ellas ya que tuve que salir volando para casa.
He sufrido mucho en esta carrera, las carreras te ponen en su lugar y esta carrera debido a que era “corta” fui a ella sin prepararla lo más mínimo, no había mirado bien, ni mal, el perfil y la ropa la preparé sin especial cuidado, eligiendo unos calcetines  que no eran los adecuados y que me provocaron la ampolla, ampolla que me tendrá unos días parado y bastante dolorido. Fui a esta carrera pensando que iba a un trail corto, y me he encontrado una señora prueba a la que hay que hablarle de usted. Moraleja: cuidado con no prestar atención a la hora de inscribirse a una prueba porque luego esa carrera te puede poner en tu sitio.
No sé si decir que repetiría esta carrera ya que es bonita, muy bonita, pero es demasiado dura y la tengo demasiado en caliente. (Seguramente el año que viene me apunte y luego raje en la cuesta).

Siempre hago las crónicas pensando en que al año siguiente las leerá alguien buscando información sobre la prueba y su organización, y para los que en 2017 estéis en esa situación leyendo esto deciros que por tema organización, avituallamientos, voluntarios...no tendréis ninguna queja pero que si vuestra experiencia en trails es nula y estáis buscando una carrera para iniciaros las hay menos duras. Si os animáis os aseguro que además de sufrir vais a disfrutar y mucho de los paisajes y guardareis como oro en paño la medalla finisher, era la misma del trail nocturno Virgen de las Piedras pero es muy bonita.

viernes, 11 de noviembre de 2016

CRÓNICA V HAGUA. HOMENAJE A LA GUARDIA CIVIL 2016

La Carrera
Además del maratón de montaña había una modalidad de media maratón y una de MTB. La modalidad de maratón, que es la que hicimos, consta de una subida a la Sierra de las Nieves con unos paisajes de gran belleza y que desconocíamos por completo ya que este recorrido tiene una parte diferente a Acinipo o Hole. Una vez se llegan a las antenas de la sierra, nos encontramos con algunas partes bastante técnicas pero es corto. Solo existe un corte intermedio por tiempo en el kilómetro 21 pero que permite hacer la carrera a marcha rápida sin correr. Aunque quizás no sería la prueba que recomendaríamos para iniciarse en los trails de larga distancia, si es una prueba asumible. Una vez se abandona la sierra nos esperan bastantes kilómetros de carriles cómodos.
Resultado de imagen de agua 2016 ronda





Organización
 
 
A pesar de algunas quejas que hemos visto respecto a la balización, y a temas como la bolsa del corredor o el dorsal no personalizado, decir que la organización ha sido muy buena y los avituallamientos muy bien servidos. Debido a que en la modalidad de maratón éramos pocos, los avituallamientos se hacían prácticamente sin coincidir con nadie y a pesar de ir de los últimos tenían gran cantidad de botellas de agua y de isotónica sin abrir, de hecho en el penúltimo avituallamiento me rellenaron uno de mis botellines de isotónica.



 
En mi caso solo ví un punto conflictivo en cuanto a balización y fue cuando comenzaba la bajada de la sierra, donde estaba el policía local a caballo, que el sendero te llevaba a la derecha y el recorrido era hacia la izquierda. Si uno se fijaba bien veía la  baliza en la alambrada pero si es cierto que quizás faltó una flecha ya que alguien que fuese despistado mirando hacia abajo seguramente tiraría hacia la derecha.

Una vez llegado a meta, te daban tu medalla finisher, un botellín de agua y un vale para un bocata y una bebida. Todo sin colas,  recuerdo que soy del furgón de cola y ya la gran mayoría de corredores se habían duchado e ido. Había posibilidad de grabar la medalla, también sin colas.

Resumiendo, buena organización y voluntarios de diez a los que les doy las gracias. Hemos estado en carreras más caras y que no tenían medalla finisher y en las que te cobraban por un plato de arroz, por lo que quejarse por si el dorsal, o la camiseta, eran feos o bonitos es un debate en el que no entramos.

 A mejorar:

- La separación entre la salida de las bicicletas y los corredores de media hora es excesiva. Hacía mucho calor y desde las 9:30h que se dio la salida de las bicis hasta las 10:00h es mucho tiempo allí de pie en el cajón esperando.

- La actitud asquerosa de algunos participantes, estábamos dentro de un parque natural y hay gente que sigue tirando los geles vacíos al suelo. A ver, si lo llevabas en tu bolsillo lleno que pesa ¿Por qué lo tiras luego vacio al suelo? Un maratón de montaña se supone que lo hace gente que le gusta la naturaleza y no concibo que te den la oportunidad de hacer una carrera por una zona tan bonita como por la que estuvimos y haya gente que no se le ocurra otra cosa que tirar sus desperdicios al suelo. El premio de guarro o guarra del día se lo lleva sin duda la persona que dejó colgada de un matojo una cámara de bicicleta. Esto es lo principal que hay que empezar a mejorar:  la actitud de los corredores de trails, unos por puercos y otros por hacer la vista gorda porque al final "por no meterse en líos" nadie le dice nada al que ve tirar porquería al suelo. O cambiamos todos el chip y empezamos a concienciarnos o mal vamos y me refiero a que mal vamos como sociedad, después nos extrañamos de que en los colegios se den casos de bullying y el resto de compañeros miren para otro lado. Somos los primeros para quejarnos de que el kilometraje que dice en el avituallamiento no coincide con el de nuestro gps o de que el refresco está caliente, pero para velar entre todos de sacar a los puercos de las carreras trails para eso no.

- La relación organización-corredores a través de las redes. Este problema junto al que está sufriendo la LRU, también en este aspecto, es para tratarlo en una entrada diferente, pero en definitiva falta una comunicación mucho mas rápida y eficaz.

Nuestra carrera

Solo un integrante del grupo iba a realizar esta trail, Jose María, desde la 101 el grupo decidió disminuir la participación en trails tanto por el tema económico como por darle descanso a las piernas. En mi caso al haber participado en Acinipo y Hole me veía en la "obligación" de participar en Hagua para conseguir una sudadera que iban a dar a los que hubiesen finalizado las tres pruebas. En el último mes había acumulado un total de 40 kms lo que hace una idea de como iba a esta prueba, iba a "verlas venir".

Llegué de los primeros al campo de fútbol donde se daría la salida y que es el mismo de donde se sale en la 101, habían señalizado desde la entrada del pueblo donde era la prueba y donde se podía aparcar, ya que teníamos a nuestra disposición una gran explanada.

La entrega del dorsal fue rápida  sin ningún tipo de colas y simplemente tocaba esperar a que fuese la hora. Tras ver salir a las bicis, pasamos al cajón eran las 9:30 y el día avisaba que iba a ser caluroso. A las 10 se dio la salida y tuve que sortear a marchadores andando y con los palos que sigo sin entender porque se ponen en primera fila.

Tras salir de pueblo y atravesar la carretera por debajo, por el mismo sitio de la 101, llevaba los vellos de punta. Pasamos por donde en la 101 está el primer avituallamiento y luego por el mismo recorrido buscando la cuesta del caramelo pero una vez allí en vez de subirla tiramos hacia la derecha, esta era la primera vez que cogía por allí.

Se trataba de ir por carriles poco técnicos, intentando llevar un ritmo ultrero acorde con mi actual forma física y teniendo mucho cuidado de hidratarme bien ya que el sol apretaba. A lo lejos y en las alturas se veían las antenas a las que me comentaban algunos corredores que íbamos. Llegamos a un punto donde comenzaba una subida que me pareció interminable ya estábamos en la subida a la antena y fueron unos 5 kilómetros de andar y andar, me costaba seguir el ritmo porque todo el mundo subía a un ritmo muy rápido para mí. Por fin llegamos a la antenas y al avituallamiento que allí había y es a partir de aquí donde más disfruté de esta carrera. Entramos en una zona preciosa con un paisaje que desconocía que existía por esta zona, es de estas veces que lo que te pones a pensar en como podrías venir aquí con tu familia para que puedan admirar lo que yo tenía la oportunidad de ver en esta carrera. Hubo una parte en bajada que a mi me pareció muy técnica y donde si es cierto que faltaba alguna baliza más, luego una pequeña subida varios llaneos parándome varias veces a contemplar el paisaje y tras cruzar por una valla donde dos hombres nos daban ánimos y nos decían nuestra posición, la 110, empezó una bajada donde sufrí bastante en las rodillas por culpa los matojos que eran todos espinosos y a la altura precisa de la rodilla, de hecho me fui con varios recuerdos para mi casa.

Tras hacer esta bajada, de nuevo un avituallamiento y ya empezaba la vuelta a Ronda de nuevo por carril sencillo, poco técnico pero también con vistas muy bonitas.

Debido a que toda la parte de la sierra desde las antenas a este punto lo había realizado a trote alegre, me animé a seguir trotando y me puse en modo ultretro sin parar a andar. Aguanté hasta el kilómetro 40, creo, ya a partir de ahí combiné andar con trotar hasta el kilómetro 43, según mi gps, y me arrastré como pude del 43 al 45 que es la distancia que marca mi gps.

La entrada en meta era con vuelta por la pista de atletismo, que siempre se agradece, y ya en un estado muy malo ya que me costaba incluso seguir en línea recta. Tras la entrada en meta, mi medalla, mi botellín de agua, mi vale para el refresco y el bocadillo. Lo primero que hice fue preguntar por donde daban la sudadera y fui a por ella, allí otro corredor que me vio trataba de convencerme de que fuera antes a tomarme una cocacola que tenía la cara blanca y era evidente  que tenía un bajonazo de azúcar. Debido a los derroteros que últimamente está tomando la LRU no me fiaba de que si me despistaba me quedara sin mi talla, así que decidí esperar  a tener la sudadera y ya luego ir a tomar algo, de todas formas había intentado tomar unos buches de agua y me entraba ganas de vomitarla.

 


Tras conseguir mi cocacola y mi bocata de tortilla me senté en el suelo, ya que no habían dispuesto ninguna silla, y fui poco a poco recomponiéndome. Una vez se me pasó la pájara y las ganas de vomitar, fui al coche a por la ropa para ducharme pero una vez en el coche pensé en que volver de nuevo a las duchas se me hacía un mundo así que decidí poner rumbo a casa.

Carrera recomendable, con una parte muy diferente a Acinipo y Hole y muy, muy, bonita. Pero advierto que tiene una zona que aunque corta es muy técnica para personas no acostumbradas.

lunes, 22 de agosto de 2016

Crónica III Breña Trail Moon Barbate

La Carrera

Trail nocturna en un paraje privilegiado por el paseo marítimo de Barbate y el Parque Natural de la Breña. Además de la modalidad trail de 17 km tiene una senderista de 13km. Esta carrera es perfecta para iniciarse en el mundo del trail ya que el desnivel es asumible y se encuentra prácticamente al comienzo de la carrera. Es exigente en el sentido de que transcurre por una zona arenosa con raices y piedras, que al ser de noche te obliga a ir muy atento. Es una de esas carreras que tiene un encanto especial y no es "una más" con el regalo añadido de la luna llena sobre el mar. Si vas a hacerla debes tener en cuenta de que uno de los principales problemas que tendrás es de arena dentro de las zapatillas que, si no son las adecuadas, te obligarán a parar varias veces para quitarte la arena.

Foto de III BREÑA TRAIL MOON BARBATE

El recorrido


Serian unos 17,6 km con un desnivel positivo de unos 300 metros. Como ya hemos dicho la dureza de esta prueba no radica tanto en el desnivel como el tipo de suelo y cuidado porque se ven caídas.

Organización

Carrera con una buena organización y con un club detrás, el CD Breña Trail Barbate,  que se vé con ganas de hacerlo cada vez mejor. Hay trails con más renombre que al acabar no te dan ni un "enhorabuena" y aquí llegas con el público haciendote un pasillo, foto de llegada, te ponen tu medalla, que es muy bonita mucho mejor que la de la segunda edición, y a tomarte una tapa de atún que estaba de 10.

A mejorar:

- Es necesario separar la salida de trail de la de senderista, ya que una vez nos unímos aquello es peligroso para los que vamos corriendo. En la zona de la torre era subrrealista había que ir esquivando a los senderistas que esperaban para la visita de la torre. Había tramos estrechos donde los senderistas andaban en grupo ocupando toda la pista.  En mi caso particular, en la bajada de arena por donde ya te ponías a nivel del mar, me encontré un grupo de senderistas con dificultades para bajar pero que no me dejaban adelantarlas "que me relajara".

- Agua: este año ha fallado el agua a partir del segundo avituallamiento. Si encuentras esta crónica buscando información para hacer esta carrera otro año, estoy seguro que ya no habrá ese fallo en próximos años ya que la organización ha sido la primera en dar la cara reconociendo el error, y es claro que otro año podrán fallar en otra cosa pero el agua ya no se les olvida. El fallo que si veo en cuanto este tema del agua, es que creemos que las organizaciones de eventos trails deberían ir promocionando actitudes limpias con el entorno, como es el llevar un bidón cada corredor. En otras trails además de los vasos para los corredores se dejan unas botellas a mano para que los que vamos con bidones nos los podamos rellenar. Evidentemente no pude rellenarme el bidón en ningún momento y eso creo que me hubiese pasado también aunque hubiesen tenido más agua. Recalco el tema de botellas a mano. Las organizaciones de los trails deben de tratar, dentro de sus posiblilidades, de concienciar de que en la naturaleza no se tira nada, ni vasitos de agua ni envases de geles.

- Balizamiento: el  balizamiento muy bueno era imposible confundirse pero deberían haber marcado algunos puntos kilométricos.

- La salida en el puerto: si se da una salida en el paseo marítimo no entiendo porque había otra salida dentro del puerto.

- La llegada: al igual que el año pasado los stands de los fisios, la barra...todo está demasiado cerca de la llegada. Llegas, te ponen la medalla y te ves envuelto en una multitud sin saber muy bien hacia donde ir. Separando unos metros la llegada de los stands se descongestiona esa zona un poco y al corredor que acaba de llegar  le es más fácil, primero tomar aire, identificar la zona de barra, de masaje...

- Cambiar el nombre de la categoría "Senderista" por "Corta": leyendo la normativa de la prueba vemos que no se dice nada en cuanto a ritmos de la categoría senderista por lo que todo aquél que la hizo corriendo lo hizo dentro de la normativa, por lo que quizás para el año que viene deberían de poner como categorías "Trail Largo" y "Trail Corto" especificando que la prueba permite hacerla como senderista.

Nuestra carrera

Tras la 101 el grupo trail se ha dedicado a descansar las piernas, a hacer mtb y aún no tenía muy claro cual sería su próxima carrera objetivo. Pero esta de la Breña Trail, tras hacerla el año pasado, sabíamos que íbamos a hacerla aunque llevásemos más de un mes sin correr. La carrera la hemos disfrutado de cabo a rabo, sabiendo que nuestra único objetivo era llegar a meta enteros y comprobando para nuestra sorpresa que algo de fondo quedaba en nuestras piernas. 

Para el año que viene volveremos a esta carrera. Muchas gracias a todo el personal voluntario que estuvo de 10 y que seguramente tuvo que soportar el enfado de algún participante.

martes, 2 de agosto de 2016

Reto La Legion 101 kms Ronda 24h conseguido

El grupo Aborigen Trailrun Team nació con el objetivo secundario de realizar los 101 kms de Ronda, en el 2015 solo un miembro tuvo la oportunidad de hacerlo y este 2016 eramos cuatro los afortunados.

Decimos objetivo secundario porque el objetivo primario era tener la excusa para quedar los fines de semanas a recorrer parajes de nuestra provincia y pasar tiempo juntos. Recorrimos bastantes kilómetros juntos por sitios tan variopintos como Vejer, Barbate, Medina, Zahara de la Sierra, Jerez, Villaluenga, Benamahoma, El bosque...las salidas fueron a las horas más inverosímiles que os podaís imaginar por poner un ejemplo a las 2 de la madrugada hemos estado recorriendo los montes cercanos a Vejer, en la Sierra San Cristóbal, en las Breñas, en el corredor dos bahías...eso a las 2 de la mañana. Luego con las carreras trail hemos recorrido casi toda la sierra gaditana. En definitiva, guardamos en nuestras retinas cantidad de imágenes de paisajes y de momentos juntos que si no hubiese sido por la excusa de preparar la 101 no habríamos tenido la oportunidad de vivirlos. 

Una vez me dijeron que con la edad se pierden los recuerdos ya que empezamos a filtrar y hay decádas de nuestra vida que se resumen en no más de 5 recuerdos, pues bien, de estos dos años uno de esos recuerdos serán esas tiradas nocturnas o esas carreras trail por medio de la sierra, a veces bajo circunstancias atmosféricas que solo unos locos hacen.

Es en una preparación para una carrera como la 101 donde de verdad comprendes que lo importante no es la meta final si no todo el recorrido que vives hasta llegar a esa meta. Ese recorrido que comenzó un 2014  en la Carrera de los Cañones de Santa Barbara y culminó el 9 de mayo de 2016.

A la espera de que algún compañero se anime a hacer una crónica especifica de la carrera solo decir que reto conseguido, por supuesto al estilo aborigen, eso de al "estilo aborigen" se quedará también para nuestros recuerdos al igual que "hoy tirada regenerativa"

Una de tantas tiradas preparatorias, esta compartida con los Nocturnis


No fuimos a la cena de la pasta


Tras la cena teníamos pendiente un Gin  Tonic con los Nocturnis

En la salida
Reto conseguido, gracias 101 por tantos buenos momentos



Dureza, amistad, buenos momentos, fango, frío, oscuridad, superación, todo eso y más me viene a la cabeza al ver esa última foto.

miércoles, 11 de mayo de 2016

Crónica III Trail Grazalema 2016

La Carrera

 Tiene varias modalidades Ultra Maratón,  Ruta Media, Corta y Promoción. La modalidad Ultra Maratón de 48 km y unos 2700 metros de desnivel positivo acumulado no es apta para cualquiera, es una carrera con tramos muy técnicos y exigentes. Este año había estado lloviendo la semana anterior y había partes del recorrido intransitables de barro. Debido a que la modalidad ultra discurre a través de el Parque Natural de El Pinsapar solo tiene 125 plazas por lo que en caso de no estar muy bien preparado para este tipo de carreras nuestro consejo es que se opte por la ruta media y dejes esas 125 plazas para personas preparadas. Ante la duda de si merece la pena apuntarse...merece y mucho.

http://trailgrazalema.blogspot.com.es/


El recorrido

 48 km y más de 2700 metros de desivel positivo con zonas muy duras pero a la vez con unos paisajes maravillos tanto la subida al puerto de Las Palomas como la parte última del Parque Natural de El Pinsapar son espectaculares.



Organización
Muy buena organización, podría ser la mejor balizada de todas las que hemos corrido hasta ahora, en los cruces no solo se marcaba con una flecha el camino correcto si no que con una señal con una "X" se dejaba claro por donde no. Salvo alguna excepción los voluntarios de 10.

A mejorar:
- Volvemos al tema de las salidas conjuntas: en este caso creo que apenas eramos 400 corredores entre todas las modalidades pero es que a apenas 1 km de la salida ya había zonas de senderos en los que solo cabía un corredor y se formaba un tapón importante. Se hicieron cajones y pusieron en primer lugar a los corredores de la ruta media y tras ellos los de la ruta larga. Nosotros solemos salir de los últimos y nos comimos tapones importantes de corredores de la ruta media. Está muy bien hacer cuatro modalidades pero quizás hay que separar las salidas, sobre todo cuando se sabe que en apenas 1km habrá un tapón importante. Ya lo de la gente recortando dentro del tapón...

- Las duchas; nosotros fuímos los últimos en ducharnos y el pabellón destinado a duchas estaba lejos de la llegada, el agua estaba fria y el suelo era un barrizal, el barrizal no estaba en la zona de duchas si no en la zona de entrada al vestuario donde se supone que te vas a cambiar. Y es que las alcachofas de las duchas estaban mal colocadas, el que las había instalado las había puesto mal, y las alcachofas apuntaban casi en horizontal en vez de hacía abajo. Así que el agua salía en horizontal, eso no fue problema para que algún iluminado utilizara la alcachofa que apuntaba hacia la puerta de entrada al vestuario y pusiera aquello hecho una porquería. Resumiendo, lugar inadecuado y corredores que les da igual el que venga detrás, ojo que esto lo vemos mucho, nos referimos a corredores que no piensan en que hay más gente por ducharse.

- Recogí tres geles dentro del El Parque Natural de El Pinsapar, es decir, solo 125 corredores tenemos la fortuna de poder acceder al parque natural y a tres no se les ocurre otra cosa que tirar allí su gel. Creo que para otros años se debería obligar a marcar los geles. 

- Yo personalmente me pregunto si es necesario que la salida sea desde el mismo pueblo, si no hubiese sido más cómodo para la organización, para el pueblo y para los corredores que iban llegando hacer la salida desde el pabellón donde estaban las duchas.

Nuestra carrera

Fuímos tres aborígenes a esta carrera, para los tres sería un entreno  para la 101 y para el que escribe una nueva oportunidad de puntuar para la LRU. Nuestra primera consigna era "despacito y con buena letra" ya que una lesión aquí y podíamos despedirnos de la 101.


Contaré mi versión, Jose María, de la carrera. Hacía dos semanas había corrido El Hole y me notaba algo cargado de piernas, había estado mirando por encima el perfil de esta carrera y no tenía muy claro que llegase a meta antes de las 9h 30 min, aunque confiaba que me pasara como últimamente que por muy cansado que me notara, una vez se diese la salida me diese un "subidón" y es que con el dorsal puesto uno suele tener un plus de energía. Pues bien, se dio la salida y empezamos a trotar rodeados de corredores de la ruta media por carretera en subida hasta llegar al primer atasco, en el sendero por el que ya nos metíamos en el monte, allí mientras avanzábamos, como podíamos, empecé a ver a gente recortando campo a través para no comerse el atasco.

Para mi gusto, mis compañeros habían salido demasiado rápido ya que habíamos trotado toda la subida de la carretera. Ahora ya íbamos por senderos al ritmo de los demas corredores y yo no me notaba bien, llevábamos 4 kilómetros y todos de subida cuando les comenté a mis compañeros que yo iba a sacar los palos, nos apartamos del sendero y nos pusimos a preparar los palos y  aprovechamos para orinar. Esta parada en el kilómetro 4 fue un gran error ya que nos adelantaron muchos corredores que luego nos fue imposible adelantar, porque no cedian paso en las bajadas. Tras 5 km de subida llegaba la primera bajada que ya avisaba de como sería la prueba, muy técnica y exigente, sobre todo por el fango. La prueba se complicó bastante por el estado del terreno por la lluvia, quizás otro año que no haya llovido no resulte tan técnico. Durante toda la bajada, de otros 5 km, ibamos avanzado a duras penas ya que estábamos metidos dentro de un grupo de corredores, todo el que nos adelantó en la parada, e íbamos al ritmo del grupo ya que era complejo adelantar, a veces porque no daban paso y otras porque realmente tampoco tenía mucho sentido apretar más para caerse.

Cuando se abrió el sendero apretamos el ritmo y así llegamos a la base de la subida del Puerto de Las Palomas, a ratos nos llovía ligeramente, hacía frío, la bajada había sido dura y exigente y ahora tocaba otra subida. Mis compañeros en la subida iban a más y yo a menos, iríamos por el kilómetro 12 y yo no podía más, aquella subida me estaba superando, conocía esta zona porque la había bajado en el Trail de Zahara y sabía que una vez viese el lago ya estaría cercano a la cumbre pero no llegaba...de repente las marcas señalan subir a través del campo sin seguir el sendero "derecho parriba", si no fuese por los palos habría gateado, en este punto la subida era campo a través con una gran pendiente directo hacia la cima. Aquí empecé a ver a corredores descompuestos. Estábamos metidos en un banco de niebla, se intuía arriba dos sombras animando que pensé que serían mis compañeros. Una vez arriba vi que eran dos voluntarios, levanté las manos como si fuese Rocky tras subir las famosas escaleras y pensé: ya está  ya me puedo ir a mi casa. Había subido el Puerto de las Palomas, estaba bastante cansado y apenas veía nada por la niebla. Ya no había tapones y la bajada era "fácil" me puse todo lo rápido que me permitia el terreno, y el banco de niebla, hasta que alcancé a mis compañeros en un avituallamiento. Cuando voy solo a una ultra tengo por costumbre no echar mucho tiempo en los avituallamientos, pero en esta si lo echamos. Tiempo que luego nos faltó al final.




Mientras me esperaban en el avituallamiento, mis compañeros habían estado haciendo cuentas y no íbamos muy bien de tiempo, estábamos demasiado cercanos a la hora de corte del kilómetro 32. Salimos a trote rápido hasta que nos encontramos una nueva subida con dos tipos de  fango: el fango tobogan en el que o clavavas los palos para avazar o resbalas como en un tobogan y el fango tipo pegamento, este fango era nuevo para mí, hacía ventosa con la suela y había que hacer fuerza para separar el zapato del suelo, que se despegaba con un "chof", ojo, una cosa es que se pegase el zapato para avanzar y otra que no resbalara, es decir, el fango pegamento también era tipo tobogán ya que el agarre solo era a la hora de intentar separar el zapato. Esta zona de subida con fango se me hizo especialmente dura.

Así llegamos a la separación de la media y la larga. Luego estuvímos mucho tiempo por un sendero cómodo con ligera subida, dirección Boyar, en el que íbamos andando con los palos, recuperándonos del palizón de la zona del barro, llegamos a un nuevo avituallamiento en el que nos quitamos las piedras de los zapatos, comimos, bebimos e hicimos la sobremesa...tras esa pausa tocó darlo todo para llegar al corte del kilómetro 32. Fueron kilómetros de trote por terrenos exigentes, a buen ritmo y todos juntos. Este tramo sirvió para comprobar lo que habíamos avanzado como grupo en este año tanto en la forma física de cada uno como en la capacidad de marchar todos juntos a un mismo ritmo, el objetivo de probar como íbamos para la 101 estaba superado. Cuando llegamos al avituallamiento llevábamos 5h 30 minutos de carrera y el corte era a las 6 horas, pero había un gran problema, quedaban 16 kilómetros (eran por dentro del Pinsapar) y menos de 3h 30min para completarlas. De nuevo en este avituallamiento estuvimos demasiado tiempo parados.  Hacíamos cuentas y según las mias ya no llegábamos, ya que desde la entrada del Pinsapar nos quedarían unos 15 kilómetros y unas 3 horas, y yo personalmente hacer 5 kilómetros por hora solo lo podía garantizar que lo hiciese si estos últimos 15 kilómetros no tenían mucho desnivel. Por experiencia de otras ultras sabía que como el desnivel fuese importante  me plantaba en un ritmo de 4 km la hora. Aquí hay que hablar del segundo error del equipo, ninguno se había estudiado bien el perfil de la carrera, estábamos allí a la entrada del Pinsapar y no teníamos muy claro si venían 15 kilómetros fuertes de desnivel o no. Bueno, pues nos enteramos, y bien, en carrera, el Pinsapar era una subida de unos 10 kilómetros diferenciada en dos partes una "cómoda" por un carril ancho de zahorra y una segunda a la que nosotros le hemos puesto varios nombres "El bosque encantando", "El bosque tenebroso" y algunos nombres más...en la primera parte, por el carril de zahorra, ibamos casi en el ritmo correcto,  los tres avanzábamos a paso ligero con los palos casi con cadencia militar. Yo ya iba sin fuerzas y Juan estaba tocado muscularmente. Por fin se acababa el carril y se  continuaba por un sendero que ya nos metía al bosque. Allí encontramos un nuevo avituallamiento. El contexto en el que ocurría todo esto era bajo  lluvia,viento,  bancos de niebla en las montañas que veíamos en frente, frío...

Tras encontrarnos el avituallamiento, bajo un intesa lluvía y viento que soportaban estoicamente los voluntarios esperándonos ya que prácticamente cerrábamos la carrera, ya nosotros pensábamos que tocaba la bajada al pueblo pero nos informaron que no, que aún quedaban unos 5 kilómetros de subida: "Venga ya, ¿Cinco kilómetros más de subida?". Fue aquí donde, para mí, empezó a importar poco el entrar en tiempo a meta y me puse en modo "Esto hay que acabarlo, pon una marcha menos por si acaso", mis compañeros se empezaron a distanciar de mí, sobre todo porque hice bastantes paradas para orinar, tenía que evacuar todo el aquarius y la cocacola que había bebido, y para tomar un hidrogel y una barrita. Estos últimos 5 kilómetros de subida, con lluvía, niebla, frío, sin fuerzas, agotado y solo, fueron muy duros. Debido a que ya en varias ultras me había dado un susto el tema de la  hidratación, en esta no solo me bebía mis bidones si no que en cada avituallamiento bebía aquarius y cocacola (es la primera vez que me atrevo a tomar cocacola en una trail) y el resultado era que en este tramo no paraba de orinar. Cada parada para orinar más se alejaban mis compañeros, hasta que llegó un momento que estaba solo.




 Es a este tramo de 5 kilómetros por el interior del Pinsapar, en el que a la dureza y a lo impresionante del paisaje había que añadir la niebla, el frío y la lluvia, al que los tres hemos coincidido en llamar el "bosque encantando".  Intentaba subir el ritmo pero no daba para más, en las paradas que hacía miraba a mi alrededor y me sentía un personaje de la tierra media que se hubiese atrevido a penetrar en el bosque oscuro, estaba yo, la niebla, el bosque, el pequeño sendero y el golpeteo de mi corazón que lo notaba de forma preocupante por detrás de la orejas. Orinar al borde de un sendero solo, con niebla y escuchando como palpita tu corazón detrás de la orejas es uno de esos momentos en los que piensas que hay que contactar con tus compañeros pronto. Mi pensamiento era "Jose aquí ni puedes abandonar porque no hay nadie que te recoja, ni te puedes desmayar porque como caigas rodando no te encuentran", por primera vez en una ultra he tenido algo parecido a una "alucinación", iba andando con los palos por ese sendero lo más rápido que las piernas me permitian y a lo lejos, en donde parecía que acababa la subida, me pareció ver a mis dos compañeros esperándome, pero eran más altos y tenían una pose de pocos amigos así que llegué a la conclusión de que serían agentes rurales del parque, me coloqué bien el dorsal para mostrarlo pero al llegar allí no había nadie. Otra parecida fue cuando por fin ví el reflejo del reflectante de la mochila de uno de mis compañeros, me puse a trotar primero y a correr después para pillarlos pero por mucho que aceleraba, y aceleré, el reflejo siempre estaba a la misma distancia hasta que se esfumó.

Por fin se acabó la subida, ahora venía un pequeño llaneo con sube y baja ya fuera del bosque en campo abierto.  Yo solo veía el pequeño sendero marcado, las rocas que tenía que saltar y la niebla. Por primera vez en la carrera llevaba tiempo sin ver baliza y al estar ya fuera del bosque llegué a dudar si ese sendero era el correcto, tras fijarme bien alrededor mía vi una baliza al fondo a la derecha, por fin comenzaba la bajada.

Era una bajada haciendo eses, llena de barro y de guijarros, pude ver al fondo a mi compañero Pedro y me puse a trotar lo más rápido que el terreno me permitía. Cuando tuve al alcance de mi voz a mi compañero, empecé a gritarle preguntándole por los kilómetros que marcaba el GPS, ya que Juan llevaba reloj  GPS, tras varios gritos entre nosotros me enteré que Juan no estaba con Pedro y había tirado solo ya que el estaba bastante fuerte (hizo su primera maratón en Sevilla con un tiempo de 3h 42min) y quería llegar a meta en tiempo.

Alcancé a Pedro justo cuando estaba hablando con unos voluntarios que había al cruzar una carretera, llegué y el voluntario me preguntó si me había enterado de lo que le había dicho a mi compañero, le dije que no y me dijo algo parecido a esto: ya no llegais a meta, os quedan 5 kilómetros y 20 minutos pero la balización sigue puesta. Luego estuvimos hablando mi compañero y yo de si este voluntario estuvo acertado en las formas con nosotros y creemos que no, entendemos que son muchas horas y que aquel día hubo mucho frío, viento y lluvía, y el tendría ya ganas de que llegásemos para poder cerrar el puesto, pero quizás en las formas se equivocó, ojo, en las formas no en el contenido.

Esta fue la conversación que tuve conmigo mismo mientras escuchaba al voluntario:
- Evidentemente la  balización seguirá puesta ¿O la quitan antes de cerrar meta?
- ¿Cinco kilómetros todavía? ¿Cómo es posible? Uuuf y eso a cuanto hay que ir...vaya a 4 min/km eso es imposible

Con tal de acabar la carrera en tiempo estaría dentro de los 200 primeros (hubo 79 llegados) que es el requisito para puntuar en la LRU, pero yo no estaba para ir a 4, ni a 5, ni a 6, quizás a 7 lo podría intentar. Mi compañero y yo ibamos trotando a ritmo bueno ya que tras cruzar la carretera era terreno llano y con poco barro, hasta que llegamos al avituallamiento de la presa. Creo que era la tercera vez que pasábamos por este avituallamiento y aquí se me vino el mundo encima, me equivoqué sobre donde estábamos y le dije a Pedro que nos quedaba muchísimo ya que ahora venía la cuesta del barro tipo chupona.  Hicimos una breve parada en el avituallamiento, les dimos las gracias a las voluntarias por estar allí y seguimos a trote, saltamos un murete y empezamos una subida y caí en mi error, esta no era la subida del barro chupona. Esta era una subida mucho más suave, con mucho barro, pero más suave y que una vez se subía y se bajaba daba a donde separaron la carrera media de la larga. Ahora me arrepentía de no haberme dado más caña desde el cruce de la carretera hasta aquí, ya que quizás no fuesen cinco kilómetros, es más estaba casi seguro de que eran menos de 5km. Tras acabar la subida, intenté ir "a tumba abierta" en la bajada pero lo único que conseguía era caerme y mi compañero no paraba de gritarme llamándome la atención y diciéndo algo del estilo: al carajo la liga, que no llegaaaas y te vas a mataaaar.

Llegamos a la carretera y nos metimos ya en el pueblo, yo aún tenía ganas de hacer algún trote-sprint de última hora pero no tenía sentido, ni el cuerpo me acompañaba, ni sabía cuanto quedaba exactamente. Por fin vimos el arco de meta, mi compañero Juan (que entró en tiempo) había pedido el favor a la organización de que no desconectaran el reloj del arco, manos juntas y en alto y entramos en meta en 9h 44 minutos. No estamos en la clasificación y no me ha servido para puntuar en la LRU, 14 minutos nos han dejado fuera de ser "finishers" aunque evidentemente nosotros nos sentimos finishers y nos fuímos con muy buenas sensaciones cara a la 101, sobre todo porque comprobamos que podemos ir juntos en equipo durante muchos kilómetros y bajo condiciones atmosféricas muy adversas. Mal sabor de boca por el tema de quedarse a las puertas pero satisfechos.


Tras terminar, nos fuímos a las duchas que estaban lejos, era un pabellón deportivo a las afueras. Las duchas estaban asquerosas de barro pero más en la zona de vestuario que en la zona de duchas, con el agua fría y con un inconventiente de última hora, y es que mientras esperaba a mis compañeros, un entrenador de baloncesto que estaba allí me dijo que ya él se iba, lo miré con cara de sorpresa pensando "¿Y que me querrá decir con eso?" me dijo que es que tenía que cerrar el pabellón. Se lo comenté a mis compañeros pero ellos me dijeron que aún estaban viendo como ducharse. Tras un rato en el que el entrenador cada vez estaba más serio, y mis compañeros también estaban más mosqueados por el tema de las prisas, el entrenador me dijo que se iba y que ya avisaria a la policia local para que viniesen a cerrar el pabellón. Esto fue bastante subrealista tanto para mí como para el entrenador de baloncesto ya que el no sabía si se podía ir y yo no sabía como explicarle que a nosotros nos habían dicho que estas eran las duchas y mis compañeros tardarían lo que tardasen ya que tenían que luchar con la suciedad de las duchas y con que el agua estaba fría.

Tras la "ducha" nos fuímos a cenar algo y mis compañeros juraban y perjuraban que nunca más harían esta ultra o al menos no la distancia larga. Yo comía y por dentro me reía recordando las veces que yo había dicho lo mismo.

PD. Está pendiente una actualización con fotos de la carrera, pero es que cuando estaba descargando mis fotos "del bosque encantando" la tarjeta de memoria se borró y perdí no solo esas fotos si no todas.